jueves, 30 de diciembre de 2010

DÍA 30 DE DICIEMBRE

Menos mal que tengo siempre un lápiz y un papel a mano porque aquí te salvan de muchos tiempos muertos. Esperar en el banco, en el matato, a la gente…Y yo siempre me pregunto: "¿qué se les pasara por la mente cuándo están esperando?", pueden tener dias sin que pase absolutamente nada, miran, hablan, esperan....
Aunque ya soy casi una experta en comida keniana: "ugali" que es una pasta de maiz, arroz; "sukuma"  como unas espinacas; "chapati y mandazi" que es como una torta de maiz frita...
Me monto en sus matatos, toda una experiencia, sabes cuando te montas pero no cuando llegas. Hay un conductor y uno que pica los billetes y van a comisión, a si que cuánta más gente se monte mejor, en la estación casi te vuelves loco porque todos quieren que te montes en el suyo.
Pero es imposible ocultar que soy una muzunga , mujer blanca, más que nada por el color de la piel.
Se te quedan mirando fijamente, se asombran, te saludan, te sonrien, hasta te acompañan cuando sales a correr....

DÍA 28 DE DICIEMBRE

Son alegres, sencillos, muy hospitalarios. Siempre te puedes sentir acompañada, porque otra cosa no, pero se paran a charlar contigo si te los encuentras, te invitan a tomar té en cuanto hay ocasión, te saludan cuando vas andando o corriendo. Hoy he salido a correr y me he cruzado en vez de con gatos y perros  con antílopes y jirafas, curioso… ¿no?. Pero también hay momentos, en que te encuentras sola porque tienes que tirar del carro tú y tienes que adaptarte a su forma de hacerlo porque si no puedes acabar muy estresada (estrés en África ¡parecería imposible!).

DÍA 27 DE DICIEMBRE

Al bajar del avión todo me resultó muy familiar, el calor, su color azabache, el desorden, el caos, la parsimonia….en un instante me vinieron todos los recuerdos del verano.
En Londres, coincidí con un grupo de españoles que iban de safari, nos llevaron por todo el aeropuerto dos ingleses porque perdíamos el avión, como íbamos el grupo y yo me confundieron con una más del grupo, me gustó encontrarme en mi situación y no en la suya, ir a construir un cole y no de safari, que por supuesto iban a pasárselo fenomenal, pero yo prefería otra cosa.

Hoy el que nos va a ceder las tierras se ha sorprendido de que quisiera ponerme a trabajar ya, porque después de un viaje como el que había hecho para ellos es inconcebible no descansar al día siguiente.
Si es que sus conceptos son otros: el del tiempo, tu eres dueño del tiempo y no el tiempo de ti, todo a su ritmo pole pole (en suajili despacio), llaman estar “very busy”( muy ocupado) a algo que nosotros llamaríamos casi estar descansando, pero lo más gracioso es que  ellos están convencidos de que lo están.

miércoles, 29 de diciembre de 2010

Poblado Maasailand en Ngong Hills

Este es un video del poblado donde se van a construir el colegio para sus niños más pobres. (Más)

¿Cómo surgió la idea de hacer el proyecto Kenia?

Este verano Amaya, profesora del I.E.S. Julio Verne tuvo la oportunidad de conocer otro lugar, otra parte del mundo que no tiene nada que ver con el nuestro, otras formas de vivir o de entender la vida, de salir y de estar fuera de la “burbuja” de comodidad en la que nos movemos.

Esta profesora estuvo dando clases a niños pequeños en un colegio de Kenia y mientras estaba allí pensó en sus/nuestros alumnos. Dado que la educación al desarrollo consiste en sensibilizar a todos los alumnos para que conozcan, para que sean conscientes de que existen otras personas, otras culturas, otras formas de vivir, diferentes del pequeño círculo en el que se mueven, ¿qué mejor forma de llegar a nuestros alumnos que uno de sus profesores les cuente su experiencia vivida en primera persona?

Además el hecho de que esta profesora vuelva a Kenia con un proyecto para construir un colegio para estos niños, ha dado pie a que se convierta en un proyecto en el que nuestros alumnos también puedan participar y además de forma voluntaria.

En primer lugar, se trató de involucrar a los alumnos en el proyecto, y una vez que conociesen las condiciones de desarrollo de estos otros entornos y culturas, se sensibilizasen y sintiesen la necesidad de actuar y pasar a un compromiso solidario y de participación social.

Contactamos con el IES José de Churriguera donde cada año intentan sacar fondos para alguna causa solidaria. Pensamos que podría ser buena idea recaudar fondos de forma conjunta, que alumnos del IES José de Churriguera e IES Julio Verne vendieran papeletas para sortear una cesta  solidaria.

Para que conocieran la realidad de Kenia , hemos dedicado un día en cada centro a que un inmigrante keniata les dé unas charlas a los alumnos sobre su vida, su país y cómo ha llegado hasta aquí. Al mismo tiempo y desde el Departamento de Economía e Historia se pidió a los alumnos de 1º de Bachillerato ,donde existe un alumnado de seis nacionalidades distintas, que prepararan una presentación de su país con información de su cultura, comida, tradiciones, etc.

Esta actividad ha sido un éxito, a los alumnos les encantó, participaban, hicieron muchas preguntas y se implicaron mucho.

Por otra parte, al tener el Instituto Julio Verne un ciclo de Educación Infantil las alumnas propusieron hacer materiales en inglés para llevárselos a los niños de Kenia. Además, también desde la asignatura de Ampliación de inglés los alumnos van a preparar una presentación de los países de Europa más significativos: Francia, España, Alemania… para que los niños de Kenia conozcan su realidad, de forma que así sea un intercambio de conocimientos.

Los alumnos del ciclo de Integración Social son los que principalmente se van a encargar de difundir y comunicar la implicación de las Comunidades Educativas en el proyecto.

¿Y a la vuelta qué?

La idea es que durante la estancia en Kenia, los alumnos puedan estar en contacto con la profesora a través de un blog.

Y a su regreso se les contará todo lo que se ha conseguido hacer con los fondos recaudados.

Creemos que es una buena manera de que los alumnos se impliquen en un proyecto de desarrollo del que luego pueden ver los resultados.